Blog
La humanización de la tecnología
octubre 1, 2021
El aislamiento provocado como consecuencia de la pandemia por el COVID 19, ponderó el uso de la tecnología como mediador de las actividades sociales, en casi todos los aspectos. Esto hizo que se vuelva a poner sobre la mesa conversaciones sobre el vertiginoso avance de la tecnología, los riesgos y los desafíos que significa, pero también trajo aparejado la visibilización de desigualdades que impactan en la población en términos de oportunidades.
De estos asuntos trató la última parada del Integralis Digital Tour. Se visitó España y con Mariano Batistelli, David Vidal e Ileana Torres se abordó el tema Alfabetización y ciudadanía digital en el contexto escolar.
Durante la conversación, se coincidió en que hay que formar a los estudiantes con el foco en el pensamiento crítico y el desarrollo de la creatividad. Hay estudios que proyectan que casi la mitad de los trabajos en los países industrializados pronto podrían ser realizados por robots o Inteligencia Artificial y por ello, el futuro laboral para el que se forma a los alumnos, es incierto, es cambiante. De aquí la necesidad de formar ciudadanos ingeniosos que puedan dar respuesta a problemas que todavía no existen.
A la hora de llevar a cabo esta tarea, las escuelas se encuentran con desafíos estructurales, ya que no todas tienen la posibilidad de acceder a la tecnología de la misma manera; de equipo y de formación, ya que resulta muy variable la adaptación de docentes a un nuevo modelo de enseñanza y de manejo de estas herramientas; y por último el desafío sistémico que todavía hoy propone un modelo de estandarización de contenidos, con una estructura muy poco ágil.
Así como el desafío del siglo XIX fue enseñar a leer y escribir masivamente a la población, hoy la educación en tecnología como área del conocimiento y del pensamiento computacional como habilidad, conforman esta nueva alfabetización que necesita el mundo.
Ahora bien, además de estos aspectos, la educación se encuentra aún más desafiada porque debe preparar a los estudiantes para enfrentarse a desafíos de tipo ético. No basta con aprender a usar la tecnología, a manejar el pensamiento computacional y programar o crear contenido, sino que es necesaria la formación integral en valores y prácticas que sean capaces de fomentar el cuidado, el respeto y la privacidad del otro.
En este sentido, es válido preguntarse qué significa ser buenos ciudadanos digitales. En mayor o menor medida, se es ciudadano digital al interactuar con la tecnología en la vida cotidiana, pero también al ser críticos con el entorno y con la información que recibimos y compartimos. Ser buenos ciudadanos digitales, es ir un poco más allá y no perder lo propio de lo humano, de ser persona y esto, dependerá en gran medida de las herramientas y conocimiento que los sistemas educativos puedan aportar.
Son muchos los desafíos que están vigentes en materia de alfabetización digital que demanda una actuación conjunta de gobiernos, organizaciones públicas y privadas, de equipos directivos, docentes, padres, etcétera. Pero también hay mucho para celebrar de la tarea realizada estos años de pandemia en que se pudo sostener el encuentro con los estudiantes, se promovió la autonomía, se bajó la guardia y, aún con inseguridades, se puso en práctica el uso de nuevas herramientas y se aprendió de ello.
La escuela del futuro exige docentes ágiles, en permanente entrenamiento y con el coraje suficiente para desafiarse a sí mismos. Animarse a ser uno de ellos es apostar por la transformación educativa para que cada estudiante pueda alcanzar su máximo desarrollo.
Para profundizar en estos temas, te invitamos a inscribirte en nuestro curso de Robótica y programación en las aulas.